Me encuentro en un momento dificil de mi vida, la angustia me atenaza y la incompresión ejerce de maestro de ceremonias, golpeando con su ceremonioso bastón que repité sin cesar Por qué,por que´. Palabras no brotan de mi alma, tan solo un sentimiento que tan bien refleja este poema de Ana Oleson.
Este dolor tan profundo de mi alma,
Se apodera de mí ser a cada día,
Mi vida ha perdido la calma
Cada momento lo vivo en agonía.
Busco respuestas en este mundo impío
Solo encuentro paredes sin salida
Un verano sin calor. Yo siento frío
Al no poder alejar esta pena de mi vida
Por qué señor, yo te pregunto
Si he sido un hombre bueno y honesto
Por qué tengo que sufrir este momento
Te pido que me des una respuesta
Mis ojos ya no lloran, mis lágrimas se han ido.
Me quedan solamente mi fe y mi esperanza.
De salir de este infierno, es lo que pido
Y que regrese a mi vida la confianza.
Nunca podrás, dolor, acorralarme.
ResponderEliminarPodrás alzar mis ojos hacia el llanto,
secar mi lengua, amordazar mi canto,
sajar mi corazón y desguazarme.
Podrás entre tus rejas encerrarme,
destruir los castillos que levanto,
ungir todas mis horas con tu espanto.
Pero nunca podrás acorralarme.
Puedo amar en el potro de tortura.
Puedo reir cosido por tus lanzas.
Puedo ver en la oscura noche oscura.
Llego, dolor, a donde tú no alcanzas.
Yo decido mi sangre y su espesura.
Yo soy el dueño de mis esperanzas.
J.L.Martín Descalzo
Un abrazo
Estoy contigo con mi oración y simpatía. En estos momentos estás crucificado; sólo puedes mirar los que menean la cabeza delante tuyo sin poder hacer nada más que esperar hasta que el Señor quiera, porque todo pasa, amigo.
ResponderEliminarMuchas veces es esta aparente inacción lo que más duele, pero nosotors sufrimos cristianamente ¡y todo es para bien!
Un abrazo con mucho cariño.