Lo que a simple vista puede parecer intrascendente, no lo es . Ya no se celebraran misas en la Cartuja, ni el Santisimo Sacramento permanecera en reserva, ni surcaran el espacio carujano las oraciones de los monjes en maitines, visperas y completas. Es como un agujero negro en el espácio físico zaragozano. Unamonos a las oraciones que imploran para que haya vocaciones a la vida religiosa.Que lástima que no pueda etiquetar este post como "buenas noticias".
Qué pena y que sintomático de los tiempos en que vivimos. Pero Dios sabe más. Quizás debemos ser los laicos los que tomemos más en serio la circulación de la gracia en el Cuerpo Místico de Cristo orando más y haciendo apostolado.
ResponderEliminarArriba los corazones.